La experiencia con el primer alimento
Cuando tenemos un bebé que se acerca al momento de iniciar la alimentación complementaria, las mamás nos llenamos de expectativas sobre su primera reacción al ver ese alimento. Imaginamos su cara cuando pruebe ese primer alimento, ¿cuál alimento doy primero? ¿le gustará? ¿se lo comerá todo? ¿lo va a botar? son las preguntas que nos hacemos y más aún si es nuestro primer bebé. Esa experiencia con el primer alimento es MUY VARIABLE, así como todo con los niños, son demasiado diferentes.
Unos devoran el alimento apenas lo ven, otro simplemente lo tocan, lo exploran, otros ni lo prueban, otros lo prueban solo un poco y luego cierran la boca por completo… en fin, puede pasar cualquier cosa.
Un primer rechazo no quiere decir que al niño «no le gustó el alimento», es completamente normal cualquiera de las reacciones anteriormente mencionadas, ellos sólo han probado su leche materna o la formula infantil y esa nueva alimentación para ellos es todo un mundo inexplorado.
De tal manera que debemos seguir exponiendo para darle la oportunidad de familiarizarse con los alimentos y así logramos la aceptación de muchos de ellos.
Y recuerda que así como la experiencia con el primer alimento es variable, la cantidad de alimentos que consume un niño también lo es.
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